Día Internacional de Tolerancia Cero con la Mutilación Genital Femenina (MGF)

6 de febrero: Día Internacional de Tolerancia Cero con la Mutilación Genital Femenina (MGF)
Una crisis en medio de otra crisis
En 2012, la Asamblea General de las Naciones Unidas, decidió conmemorar el 6 de febrero, cómo el Día Internacional de Tolerancia Cero contra la Mutilación Femenina, con el objetivo de enfocar de forma eficiente los esfuerzos para eliminar está práctica que se lleva adelante en 29 países del mundo.
Cómo consecuencia de la pandemia por COVID-19, millones de niñas corren mayor riesgo de ser víctimas de la mutilación genital femenina, anulando décadas de progreso, en la búsqueda para poner fin a la MGF que tiene consecuencias devastadoras en los países donde se realiza, explica Nankali Maksud, asesora superior de UNICEF en materia de prevención de prácticas nocivas. Durante los últimos años, el poco acceso a servicios vitales, escuelas y redes comunitarias pusieron en peligro la salud, la educación y el futuro de esas posibles víctimas.
¿Qué es la mutilación genital femenina?
La MGF es un procedimiento que se realiza a una mujer o niña con el objeto de alterar o lesionar sus órganos genitales por motivos no médicos y constituye una violación de los derechos humanos fundamentales de niñas y mujeres. Todos los años, alrededor de 4 millones de niñas en todo el mundo, corren el riesgo de ser víctimas de esta práctica, la mayoría de ellas, antes de cumplir los 15 años.
No existen razones médicas que logren explicar la ablación genital femenina, en los países donde se practica, la violencia contra niñas y mujeres es aceptada socialmente, conformando una norma muy arraigada en la desigualdad de género. La OMS considera que: “Refleja una desigualdad entre los sexos muy arraigada y constituye una forma extrema de discriminación de la mujer”. Se estima que más de 200 millones de personas, fueron sometidas a la cruenta práctica.
No existe ninguna circunstancia que explique el porque de esta práctica, ni siquiera existen textos religiosos que lo exijan, los únicos motivos son culturales: la transición a la madurez y como forma de controlar la sexualidad de la mujer.
La educación cómo instrumento para erradicar la MGF
La batalla contra la mutilación genital femenina debe ser librada a través de la educación y la mediación con las respectivas comunidades. “Tiene que dejar de ser una condena nacer niña en algunos países del mundo”, ha proclamado la Unión de Asociaciones Familiares (UNAF). Esta Organización insiste que la mutilación genital femenina, constituye una forma de violencia de género. En el documento llamado: “Mutilación Genital Femenina: Información para la salud de mujeres y niñas”, que se distribuye entre miembros de comunidades que llevan a cabo está práctica, se comparten acciones para concientizar la importancia de erradicar estas prácticas.
@danielhectorsa3