Efemérides en clave de ESI
Se acerca el 25 de mayo y, con él, docentes y autoridades comienzan a pensar alternativas para la celebración del acto patrio que conmemora aquel 25 de mayo de 1810 y que marcó un antes y un después en la historia nacional. La pregunta que trae la ESI en este contexto es si sería posible recrear aquella gesta histórica desde una mirada de género. No hay duda que aquel hecho de principios de siglo XIX tenía una marcada presencia masculina, y el protagonismo que cuentan los libros de texto está puesto en el grupo de criollos que conformaron la Primera Junta de gobierno que se alzó frente a la decadente monarquía española. Pero ¿dónde estaban las mujeres en la época colonial? ¿Sólo vendían empanadas y lavaban ropa? ¿Qué lugar ocupaban las personas que no tomaban decisiones políticas? ¿No es posible pensar que hay “otra manera” de contar la historia y de recrearlas en los actos escolares?
En el cuadernillo La madre de la Patria, de la colección El género de la patria, se describe que las efemérides son parte de la vida escolar y representan una práctica que desde sus orígenes estuvo destinada a construir pertenencia nacional. Pero, también agrega, que han sido criticados por varias razones, entre la cuales se menciona que “construyeron una narración sin lugar para las mujeres”. Por eso el material invita a reflexionar sobre el lugar de las mujeres y otros colectivos silenciados; sobre la relación entre ciertos mandatos de la masculinidad, como la virilidad y el coraje, y la noción misma de patria para ampliar la mirada sobre la historia desde una nueva agenda de derechos, profundizando el nexo entre efemérides y democracia.
Las propuestas, separadas por niveles, son diversas. En el Nivel Inicial se puede trabajar sobre la vestimenta, aspectos y costumbres de la época, o el rol de las mujeres en la historia de la Patria. También puede hacerse un análisis de la canción “Cielito de la Independencia” de Bartolomé Hidalgo conversando luego cual es el concepto de Patria, como nace esa Patria y qué significa ser libres para el autor, para la sala y para cada estudiante. En el Nivel Primario se sugiere conversar sobre el significado de la palabra “Revolución” y qué sentido tuvo en aquel 25 de mayo de 1810 y que repercusiones tiene hoy ese término. También se les puede interpelar acerca de los roles que cumplían varones y mujeres durante el proceso independentista y qué cambios se dieron desde la Revolución de Mayo hasta nuestros días, para plasmarlo en una línea de tiempo que describa cómo eran la vestimenta, los caminos, los transportes, las viviendas, las comunicaciones y las formas de hacer política.
Para el Nivel Medio se puede pensar en investigar, visibilizar y reivindicar la figura de María Remedios del Valle, cuya historia puede leerse en el sitio Las mujeres de la Revolución, del portal Continuemos estudiando, gobierno de la provincia de Buenos Aires para luego construir un debate a partir de preguntas como: ¿Qué se sabe de su vida y de su participación en los combates? ¿Qué reconocimientos se le han hecho? ¿Qué aspectos se valoran de ella? ¿Cómo se imaginan el papel de la mujer en ese momento en medio de los ejércitos patrióticos? ¿Por qué fueron silenciadas? ¿Cómo era la situación de los “pardos” en este contexto histórico? ¿Por qué creen que el relato de su vida emerge en la actualidad? ¿Qué cambios sociales se produjeron para que hoy se hable de ella y se valore su figura?
En el texto Las fuentes como puertas de entrada al pasado: la indagación de la vida cotidiana, las docentes Elsa Godoy y Laura Vasta se preguntan “¿Cómo acercar a los niños pequeños a la idea de que las sociedades pasadas resolvían su cotidianidad de otra manera? ¿Cómo romper estereotipos instalados desde las representaciones culturales a través de las efemérides y actos patrios en el jardín de infantes?” y responden a estas inquietudes con una serie de recomendaciones a tener en cuenta a la hora de abordar los actos escolares, para incluir a personas y colectivos que han sido tradicionalmente invisibilizados.
Una de ellas, para Nivel Inicial, es superar los estereotipos de la “época colonial” que, a lo largo de años, han contado una historia en la cual “toda la vida de la ciudad giraba en torno a los ‘vendedores’ de velas, agua, etc. que circulaban ofreciendo sus productos con típicos ‘pregones’ (…)” donde aparecen negros, mestizos e indios, mostrados de manera “ingenua o banalizada”, invisibilizando los espacios públicos y privados donde transcurría gran parte de la sociedad de la época. Algunas imágenes para trabajar, según las autoras, pueden ser comparar e interpretar las acuarelas de Emeric Essex Vidal o las de César Hipólito Bacle. Para el abordaje en el Nivel Primario proponen la lectura, de “Los cuentos de la tía Clementina” (Zelmanovich, 1994), como “Una vuelta por la historia. Anochecer de un día agitado” o “Disturbios en la procesión” que recrean hechos y aspectos históricos en torno a la destitución del virrey la semana del 25 de mayo de 1810. También recomiendan el relato ficcional escrito por Diana González y Analía Segal: “¿Adónde va Jacinto Congo?” Una historia para el Bicentenario (2010) que narra el recorrido de un farolero por la ciudad de Buenos Aires, el día del festejo del primer aniversario de la Revolución de Mayo.
Repensar las efemérides patrias en clave de género es posible. “La escuela y la posibilidad de trabajar en ella con nuevas, inesperadas y situadas miradas es una de las tareas más movilizantes que propone la ESI” plantea la publicación Efemérides escolares, miradas desde la ESI, del Equipo ESI Santa Fe. El texto es una invitación que abre las puertas a revisar los relatos contados desde los discursos construidos en torno a las formas tradicionales de mirar y habitar el mundo, a enmarcar el pasado nacional con sus luchas y recuerdos para avanzar hacia una nueva agenda de derechos, a darle lugar a las mujeres y a otros grupos invisibilizados e ignorados para tomar conciencia y construir otra mirada de la historia que promueva un futuro donde todas las personas tengan voz y sean escuchadas.